Rockin’ Heaven

Durante años, las obras que provenían de la Ribon fueron las que más nos llegaron, sobre todo a raíz del éxito de Marmalade Boy. Los tiempos y gustos fueron cambiando y ahora son las excepciones en las licencias... si es que llega alguna que no sea una reedición. Una de las últimas apuestas por autoras de la revista fue Mayu Sakai por parte de Panini. Hoy toca reseña de una de las dos obras que nos llegaron. 


Título: Rockin’ Heaven
Título original: Rokkin★Hebun
Autora: Mayu Sakai
Tomos: 8
Fecha de publicación en Japón: 2005 - 2008 
Revista: Ribon
Editorial japonesa: Shueisha
Fecha de publicación en España: 2009 - 2010
Editorial española: Panini
Estado: Publicación completa
Precio: 7,5€ (#1 - #7), 8,50€ (#8)

CURIOSIDADES / DATOS EXTRA
- Rockin’ Heaven es la obra más extensa hasta el momento de Mayu Sakai. (Nota de actualización: Sugar Soldier adelantó a esta obra con 10 tomos).
- Hay gran cantidad de tiras cómicas, comentarios de la autora y un apartado de páginas extra al final de todos los tomos con el título de “La repágina”.
- Relacionadas con la trama, la serie incluye un par de capítulos especiales sobre personajes secundarios al final de los tomos #6 y #8, además de historias de tres o cuatro páginas también sobre personajes secundarios al final de los tomos #2, #3 y #5. También cuenta con una historia corta repartida en tres capítulos al final de los tomos #5 y #8 titulada Una Sawa angelical y con Home Sweet Home en el tomo #4.
- La serie cuenta además con dos historias cortas independientes: Endless March (Tomo #1) y Brown Garden Station (Tomo #6). 

ARGUMENTO
Sawa Konishi está muy ilusionada con la perspectiva de empezar la secundaria pero lo cierto es que eligió el nuevo instituto únicamente porque le encantaba el uniforme. Una vez allí, no tarda en enterarse de que la academia Amabane fue íntegramente masculina hasta el curso anterior y que, por lo tanto, la proporción de chicos y chicas está totalmente desequilibrada encontrándose en minoría absoluta.

Sawa es asignada a la clase 1ºG donde solo hay una chica más, Akira Nagashima, que aspira a ser mangaka shôjo. Con este panorama, Sawa se encuentra totalmente sola y rodeada de un montón de chicos sin ningún interés por aprender o hacer algo productivo. De hecho, la clase de 1ºG es conocida en todo el instituto como “la clase de los gamberros” ya que los estudiantes más conflictivos se encuentran allí.

Sawa no está dispuesta a dejarse vapulear por ellos, por mucho que Ran Matsuyuki, el cabecilla de la panda, sea el hijo del presidente del Amabane. Ignorando las recomendaciones de Akira, Sawa planta cara a Ran provocando a todos los gamberros de clase que deciden hacerle la vida imposible para que los deje en paz. Pero Sawa no se dará por vencida tan fácilmente y quizá los chicos de 1ºG no sean tan incorregibles como parecían, en especial Ran.

RESEÑA
Mayu Sakai comenzó su andadura en el shôjo en 2001 y en poco años ha conseguido ganarse un hueco destacado en la Ribon mejorando muchísimo su estilo de dibujo. Su última obra, Momo, se ha situado en el top ten varias veces. En España se ha publicado, además de Rockin Heaven, otro manga algo anterior, Nagatachô Strawberry.

El planteamiento inicial puede parecer de lo más típico pero Rockin Heaven está lleno de sorpresas y matices propios que consiguen sorprender y entretener al lector. A diferencia de otras obras de este género, no se centra en la pareja principal sino que desarrolla extensamente a los secundarios. Además, la relación principal tiene una evolución muy curiosa y el carácter y el pasado de los protagonistas es importante y algo a tener en cuenta pues influye en los hechos de forma coherente. La personalidad de todos sumada a las acciones imprevistas borran esa primera impresión de shôjo tópico de la Ribon.

La autora se divierte con la gran cantidad de extras de este manga, haciendo tiras cómicas, one-shots complementarios, comentarios sobre las portadillas… Pero este hecho se convierte en un punto negativo cuando hay tomos que tienen un porcentaje realmente bajo de páginas de la historia en sí. Ciñéndose a la cantidad de extras, la mera recopilación de los capítulos no pasaría de los seis tomos cuando la obra consta de ocho. Por otro lado y como contrapartida a este punto criticable, la mayoría de extras complementan la historia principal explicando un poco más de los personajes secundarios, algo que de haberse insertado en la trama de la serie habría dado una lectura más fluida.

En este shôjo aparecen muchísimos personajes, todos con personalidades bien definidas y muy distintas unos de otros, lo que permite gran cantidad de relaciones intrincadas en todos los aspectos: familia, amistad y, por supuesto, amor.

Sawa es, quizá, el personaje más prototípico de este manga y es que es una chica totalmente inocente, altruista y buena que se preocupa constantemente por los demás a la par que es bastante impulsiva y un poco despistada. Es algo infantil y muy cabezota. Es el personaje con menos evolución ya que, a fin de cuentas, no la necesita. Es un personaje transparente y sin malicia alguna que hará mucho bien a todos los demás durante el transcurso del manga. Podría hacerse cargante para aquellos que estén acostumbrados a este tipo de protagonistas idealizadas pero conforme se desarrolla la trama adquiere más profundidad y no deja de ser un personaje interesante.

Ran es diametralmente opuesto a Sawa, siempre serio, siempre desconfiado, siempre a la defensiva. Arrastra con muchos traumas del pasado y está harto de ver como todos sus amigos siempre le dan la razón solo porque sienten compasión por él. No sabe tratar con la gente, es un chico de pocas palabras y tiene su propia visión de la cosas y de las relaciones por lo que suele ser difícil hablar con él. A pesar de todo eso, no es más que alguien falto de cariño que solo quiere poder relajarse y ser feliz. De la misma manera que Sawa, se irá profundizando en él en los últimos tomos cuando se revele al lector qué le ocurrió cuando era pequeño.

Entre los compañeros de clase, los alumnos de otros institutos y los familiares hay multitud de personajes secundarios que, como se ha comentado más arriba, no siempre son tan secundarios.

Para empezar, se encuentra Akira Nagashima, la única chica de la clase de 1ºG aparte de Sawa. Al igual que Ran, también es totalmente distinta a Sawa y, en realidad, no le cae nada bien por estar siempre tan contenta y llevarse bien con todo el mundo con tanta facilidad. Akira quiere ser dibujante de manga y eso le ha causado varios problemas en el pasado forjándose una personalidad muy cerrada y fría. Siempre está al tanto de todo lo que pasa y conoce todos los cotilleos y detalles personales de sus compañeros que supuestamente utiliza como material para dibujar. Se le da muy bien dar consejos y es muy práctica y sincera (hasta el punto de ser ofensiva). Es uno de los personajes que más evoluciona con el transcurso del manga y da mucho juego.

Entre la pandilla de Ran se encuentran Tsubaki, Kido, Ogawa y Taguchi. Satoshi Kido y Tomoki Ogawa son muy desenfadados y aportan un toque humorístico y distendido al manga. Sôta Taguchi es un otaku que consiguió integrarse gracias a la ayuda de Ran y los demás y les tiene mucho aprecio. Jun’ichi Tsubaki es el más misterioso de todos ellos y el que parece estar más apegado a Ran, es el más sensato del grupo y siempre está pendiente de todo.

Hay otros alumnos que juegan papeles muy importantes en la trama como Yuri Shirakawa, una alumna del instituto femenino Eika (hermanado con el Amabane) que estuvo saliendo con Ran. Y Haruki Sugishita, un joven famoso que se traslada al Amabane y que causará bastante revuelo.

Aparecen varios familiares de todos los personajes pero tiene especial relevancia la familia de Sawa. Sus padres y su hermana Sachi aparecen repetidas veces y aportan mucho humor, además de ser indispensables para entender el entorno tan cálido en el que ha crecido Sawa, el cual ha forjado ese carácter tan dulce que tiene.

En cuanto a las historias extra, Home Sweet Home narra cómo se conocieron y enamoraron los padres de Sawa. Además, hay diversos capítulos cortos sobre los personajes de Rockin’ Heaven, muchas historias divertidas sin más propósito que el de entretener, alargar la serie y dar un punto cómico extra. Al final del último tomo hay una historia corta más extensa acerca de la hermana pequeña de Sawa, Sachi, años después del final de Rockin’ Heaven.

Endless March y Brown Garden Station son dos one-shots sin relación con la trama principal. En Endless March se presenta a Yayoi Otowa, una estudiante de música que no soporta a su nuevo profesor de piano, el joven Terawaki, ya que no sabe hacer otra cosa que decirle que vuelva a tocar la misma pieza una y otra vez sin decirle qué es lo que hace mal. Yayoi está convencida de que en realidad Terawaki no tiene ni idea de música hasta que un día le oye tocar el piano y empieza a cambiar de opinión. Por su parte, en Brown Garden Station, Joshua se pregunta por qué una misteriosa niña llamada Clau se pasa el día contando historias fantásticas en la estación. El día que la conoció oyó una historia sobre una bruja que esperaba a su amado esperando en un cuerpo que no era el suyo pero él nunca regresaba… En ambas historias el dibujo es algo más antiguo pero ambas son agradables de leer y están muy bien llevadas.

El dibujo de Mayu Sakai es muy cuidado y si se hojean obras anteriores se observa claramente su evolución. Se caracteriza por ojos grandes tanto para chicas como chicos, todos los personajes tienen un aire algo infantiloide y peca en algunos planos en los que las caras se ven algo extrañas. El dibujo es muy irregular y es difícil de definir ya que alterna planos muy buenos con algunos bastante criticables. Su estilo puede recordar al trazo de Arina Tanemura en algunas escenas pero se trata de viñetas concretas en las que el dibujo mejora súbitamente. El siguiente paso en la evolución de esta autora quizá sea que consiga cierta linealidad y defina mejor su propio estilo.

La edición es correcta con páginas blancas y encoladas y las portadas son fieles a las originales con un diseño muy acertado. Sin embargo, la ausencia total de portadillas es muy criticable. Mayu Sakai se dedica a comentar todas y cada una de las portadas de cada capítulo cuando en la edición española de Rockin’ Heaven no aparece ninguna de ellas, sólo se puede ver una imagen de muy baja resolución en un extremo de la página anterior al comienzo del siguiente capítulo en la que no se puede apreciar bien casi ninguno de los comentarios de la autora. Además, causó mucho revuelo con la subida del precio del último tomo de la colección, completamente desmesurado y mal recibido.

Rockin' Heaven es un manga que alterna sucesos pasados algo duros con múltiples escenas de superación personal, personajes asociales e introvertidos con la formación de sólidas amistades, sentimientos no correspondidos con el caos interior de aquellos que ya no saben qué hacer o a quién escuchar. Este manga es, en definitiva, una historia de amor donde la amistad y la familia tienen un peso muy importante y donde todo está inevitablemente adulterado por la revista en la que se publicó, Ribon, más bien destinada a niñas de entre 12 y 15 años. Por todo ello, es recomendable para aquellos que busquen algo sencillo y bonito con un previsible final feliz.

VALORACIÓN
Historia: 8,5
Originalidad: 6
Dibujo: 7,5
Edición: 7

REDACCIÓN: Kuroi_Neko

Comentarios